ARA, JAVIER / ORTIZ, JAVIER
En la granja de Bernal, los animales no hacen los sonidos que les corresponden.
Todo empezó porque el pollo comenzó a ladrar, y eso confundió tanto al resto de los animales de la granja, que estos a su vez hacían sonidos impropios de cada uno de ellos.
Los niños lectores tendrán que ayudarles a encontrar la verdadera voz de cada uno de los animales a través de las páginas de este divertido cuento.
¿Encontrarán los animales su verdadera voz?