ADAIR, MARINA
Annie cree que la única manera de dejar de sentirse fuera de lugar escrear su propia familia. Sin embargo, le está resultando bastantecomplicado, porque todos los hombres con los que sale encuentran elamor de su vidaà justo después de romper con ella.Tras su últimodesengaño, decide que es hora de empezar de cero, sin hombres. Y semuda a Roma (Rhode Island, EE. UU.), y no a Roma (Italia), paratrabajar en el hospital de la ciudad, donde, por sorpresa, acabacompartiendo casa con un compañero tan enigmático como corpulento y sexy.
Tras cubrir una historia literalmente explosiva enChina, el fotoperiodista Emmitt Bradley vuelve a casa herido y con laintención de afianzar el lugar que ocupa en la vida de su hijaPaisley. Pero con un padrastro y un tío entregado, Emmitt parece tener que pelear por su sitio. Por no hablar de la adorable invasoraque ocupa su casa, que supone un problema añadido, uno que a él leencantaría resolver en la intimidad. Demasiados frentes abiertos:Annie ha renegado de los hombres, Paisley está en pleno furoradolescente y el padre de Emmitt, con el que estaba distanciad